Toma de Decisiones por Consentimiento Integrativo y Paul Nutt
¿Qué porcentaje de decisiones, tomadas en el ámbito empresarial, crees que son acertadas?
Leía en el blog de Miguel Ariño las conclusiones de un estudio realizado por Paul Nutt que asegura que la mitad de las decisiones que se toman en el ámbito empresarial, fallan.
¿Cuáles crees que son los motivos por los que se falla en la toma de decisiones? El estudio de Paul Nutt llega a la conclusión de que son tres los motivos:
- Los directivos imponen las soluciones. «El jefe decide lo que hay que hacer sin contar con la opinión de personas que están más cerca del problema y que pueden aportar información útil para resolver el problema que se tiene entre manos».
- Se limita mucho el número de alternativas que se consideran. «En cuanto se nos ocurre una idea que puede resolver nuestro problema, la llevamos a la práctica sin explorar posibles mejores alternativas».
- A la hora de poner en práctica la solución que hemos decidido, imponemos el modo de hacerlo.
Todavía es pronto para saber cuál es el porcentaje de decisiones correctas usando el procedimiento de Toma de Decisiones por CI pero lo que puedo asegurar a día de hoy es que en la toma de decisiones por CI:
- Nadie puede imponer ninguna decisión. Las decisiones se fundamentan en información útil y relevante, que nos indique que la decisión es la adecuada, independientemente de la persona que presente dicha información.
- Se busca la inteligencia colectiva a través de la diversidad de opiniones, pareceres, sensaciones e informaciones, con la finalidad de conseguir el mayor número de opciones posibles. Como decía Margaret Heffernan, las buenas ideas y la verdadera innovación necesitan de interacción humana, conflicto, discusión y debate.
- Por otro lado, se separa la toma de la decisión de la ejecución de la misma. Además, dentro de unas condiciones de contorno que aseguren que la decisión no se desvirtúa por el camino, son las personas que implementan la decisión quienes definen cómo hacerlo, sin ningún tipo de imposición.
Las malas decisiones empresariales afectan a la cuenta de resultados y además a las personas que padecen las consecuencias de estas malas decisiones. La buena noticia es que parece que hay recorrido para hacer las cosas mejor de lo que se están haciendo.
Creo que el futuro de las decisiones más adecuadas vendrá derivado de este tipo de procesos. Es curioso que estando en la sociedad de la información y del conocimiento, muchas decisión se sigan tomando «a la ligera», sin argumentación más allá de la de un cargo jerárquico o una dejadez colectiva.
Coincido contigo. Saber que la mitad de las decisiones se están tomando mal, así como las consecuencias de las malas decisiones, debería ser suficiente para hacer las cosas de otra manera.
Son muchos los obstáculos que hay que superar para tomar buenas decisiones, en ocasiones es la dejadez, como bien dices, en otras ocasiones el miedo al conflicto, las prisas, o el deseo de ocultar información para mantener el poder pero hay formas de minimizar estos obstáculos y, en definitiva, de tomar mejores decisiones.