#VidaSinEstrés: Aclarar el significado de las cosas

Aclarar o procesar consiste en hacerse preguntas

“Hacer preguntas es prueba de que se piensa.” R. Tagore

Aclarar es el segundo de los cinco pasos de GTD para obtener el control.

Cuando aclaramos, vaciamos las bandejas de entrada y transformamos las «cosas» que tenemos en ellas. Es decir, una bandeja de entrada aclarada es una bandeja de entrada vacía, porque hemos pensado y decidido sobre todas las «cosas» que contenía.

Es un paso fundamental que requiere que pienses y tomes decisiones.

Aclarar es muy fácil. Tenemos que ir cogiendo los elementos de uno en uno e ir haciendo de forma sistemática estas dos preguntas para cada elemento:

  1. «¿Qué es esto?» O lo que es lo mismo y a mí me gusta más, ¿qué significa esto para mí?
  2. «¿Es accionable?» O lo que es lo mismo y a mí me gusta más, ¿requiere acción?

En este post escribiré sobre la primera pregunta del proceso de aclarado, porque muchas veces veo como las personas la ignoran y me parece crucial que se responda correctamente.

Si te saltas esta pregunta estarás aclarando mal.

Para la pregunta «¿qué es esto?», o «¿qué significa esto para mí?», buscaremos respuestas de este estilo:
Es una obligación, un favor que me piden, una duda (mía o de otras personas), información útil, una posibilidad, una tontería, un deseo, un cabreo, una preocupación, un problema…

Como ves son múltiples las respuestas porque son múltiples los posibles significados que cada email, llamada perdida o mensaje de WhatsApp puede tener.

En ocasiones nos encontramos con que una sola «cosa» de la bandeja de entrada tiene dos o tres significados. ¡Ningún problema! Lo fundamental es que sepas el significado o significados que tiene para ti.

Por ejemplo, puede que una parte de un email signifique «información», que otra parte de este signifique «una obligación» y que una tercera sea «una tontería».

Enfrentarnos a lo que realmente significa para nosotros cada uno de los elementos de la bandeja de entrada es imprescindible si queremos aclarar correctamente.

Las «cosas» que tenemos en nuestras bandejas de entrada requieren que pensemos sobre ellas, probablemente no mucho, tan solo unos segundos en la inmensa mayoría de los casos, y hacerlo bien nos permitirá poder responder correctamente a la segunda pregunta: «¿es accionable?» sobre la que escribiré en un próximo post.

Así que mi recomendación de esta semana es: cuando aclares tus bandejas de entrada, nunca, nunca, nunca te saltes la pregunta ¿qué significa esto para mí?