Te cuento lo que vivido en mis IX Jornadas:
“La vida empieza al final de tu zona de confort. Así que, si te estás sintiendo incómodo ahora mismo, que sepas que el cambio que está sucediendo en tu vida es un principio, no un final.” Neale Donald Walsch
El 21 y 22 de junio celebramos las IX Jornadas en innovación OPTIMA LAB. En esta ocasión queríamos aprovechar para renovar el material fotográfico de la red, así que el primer día de jornadas quedamos en la popular taberna «Casa Mingo», José Miguel, Cruz, Jordi, Jero, Antonio José, David, Jesús y yo, muy próximos al estudio fotográfico donde habíamos quedado con Xavier Vila y Cristina García de Quesada para nuestra sesión de fotos.
Me encantó volver a ver a Xavi Vila. Su cercanía y su profesionalidad hacen que contar con él como fotógrafo sea siempre una fantástica experiencia. Mil gracias por todo, Xavi. Gracias, también a ti, Cristina, por tu amabilidad y profesionalidad.
El segundo día fue ya en el Palacio de los Infantes en el Eurofórum y, aunque también hubo sesión de fotos, fue una jornada en la que estuvimos plenamente centrados en nuestro trabajo. En esta ocasión cada uno de nosotros fuimos exponiendo el tema, o los temas, que pensábamos que se debían afrontar, y los fuimos tratando uno a uno.
Hablamos sobre la contribución de cada uno de nosotros, el trabajo realizado, lo que queda por hacer, el futuro de la red, la formación oficial de GTD® en España y sobre nuevas formas de contribución y compensación.
Desde mi punto de vista, según va pasando el tiempo son cada vez más visibles los frutos de los pasos que hemos ido dando desde las primeras jornadas en 2014.
A día de hoy, el proyecto OPTIMA LAB es un proyecto maduro, que goza de una excelente salud y tiene unas perspectivas de futuro muy positivas. Son muchas, cada vez más, las personas y las organizaciones que confían, y siguen confiando, en nosotros. Este hecho me hace pensar que vamos por buen camino.
Personalmente, mi lectura del presente es también muy positiva. Nuestro empeño por aportar valor real a las personas y a las organizaciones nos hace vivir en un continuo deseo de aprender y mejorar en múltiples facetas.
Pero no quiero quedarme en la autocomplacencia. Pienso que hay un área de mejora importante tanto para mí como para la mayoría de los nodos de OPTIMA LAB. Se trata de nuestra faceta comercial. Siendo sinceros, lo que hemos hecho hasta la fecha en este terreno, la mayoría de nosotros, es muy poco o casi nada.
En cuanto a mis conclusiones, he salido de estas jornadas pensando que OPTIMA LAB es un proyecto altamente exigente para todos nosotros y que no admite «medias tintas». Y, por mi parte, con un propósito firme de seguir haciendo las cosas cada vez mejor, aprendiendo de mis errores y continuar trabajando con toda mi ilusión.
Porque miro hacia atrás y me gusta el camino que he recorrido hasta ahora. Por eso quiero seguir aprendiendo, para poder estar a la altura de los nuevos proyectos que nos depare el futuro.
1 comentario
Los comentarios están cerrados.